Bueno, Qué buen mediodía el día de ayer. A veces pensamos…, ¿Cuál es el verdadero Estudiantes?
La verdad es qué es esto que vemos. Cuándo puede juega bien, por momentos no, y en otros nos hace poner tensos. Pero Estudiantes es esto qué está construyendo el ruso Zielinski. No es más ni menos qué lo qué quería la mayoría del pueblo futbolero pincharrata. Hoy es un equipo qué puede jugar mal o regular, pero se entiende a que juega. Tiene una identidad.
Ayer escuché una expresión que la quiero tomar para mí: “Estudiantes hoy es como ir al dentista”. No hace falta explicar que a nadie le gusta ir al dentista, siquiera cuando uno lo necesita. Es que Estudiantes se convirtió en un equipo incómodo para todos los rivales, y eso puede agradar más o menos, pero es lo que tenemos y es un gran punto de partida. Con este equipo podemos ganar, empatar o perder, pero generalmente si los jugadores no están en un mal día , cómo puede tener cualquiera, nadie nos pasará por arriba. Hay cosas por mejorar claro. Hay momentos qué los centrales en especial Rogel no brinda muchas garantías. Que por la izquierda, por ejemplo, ayer, nos ganaron en muchos pasajes del partido las espaldas. En el medio el Corcho sigue siendo lo más parejo sin deslumbrar pero es rendidor, parejo. Un viejo conocido cómo Zuqui se ha transformado en un elemento indispensable en el equipo del Ruso. Creo que como a mí, nos ha sorprendido gratamente y ésta la tomo como una buena incorporación, mejor dicho reincorporación. Pellegrini de a poco puede mostrar algo. Ojalá explote. Arriba prima facie no parece temible, pero entre Apaolaza y Del Prete, hicieron unos cuantos goles y sumado a la siempre generosa predisposición de Castro y su aporte imprescindible al gol, nos coloca en una posición expectante en la tabla del Campeonato y también en la de las copas.
Ayer fue un partido de esos qué antes perdíamos seguro. No tuvimos el balón mucho tiempo y ni siquiera la hicimos circular a la redonda con algo de prolijidad. Pero resulta qué a las 15:30 hs se consumaba el almuerzo de otros tres puntos. La verdad es qué la llegada del Ruso era lo que había indicado al médico. No sé a dónde vamos a llegar pero es muy probable que “La Rusoneta”, no nos deje a pata.
Estudiantes es escuela de vida, de jugadores de fútbol y también de técnicos; pero de técnicos qué mínimamente abrazan valores que conocemos y le atribuimos a Estudiantes de la Plata. El Ruso no es un pibe ni lo formamos como técnico; pero traía un libro consigo que aunque estuviera escrito en ruso, acá se lo entendía. Y es así nomás, lo qué a priori necesitábamos: entender el libreto de la obra y con los actores que tenemos, lo que podemos interpretar. El fútbol no es tan difícil, como decía un viejo conocido de la casa: “la pelota hay que pasársela a los de rojo y blanco” y tratar de meterla en el arco de enfrente, por lo menos una vez más que en el nuestro nuestro.
Para mí he, para mí.
Fernando Contini